Todo se percibe tan efímero.
Siempre he pensado que estoy maldito por el grado de conciencia que me acompaña. Es raro, verme en el espejo y ver a un pedazo de carne que se mueve y habla. Un pedazo de carne que se ha desmpeñado "muy bien profesionalmente", cuando eso en realidad a nadie le importa. El dinero me da asco, el "status" me da asco. Veo a mi alrededor y no veo más que pura falsedad. Siempre voy a tratar de ser el mejor en lo que sea que se me confíe, pero eso no cambia mi sentir. Lo hago por mí, por contribuir, por "ayudar" a cumplir. No por ser alguien.
Yo no soy parte de eso, ni lo seré.
Al final, todo se reduce a un montón de huesos, a recuerdos que sólo permanecerán temporalmente en una mínima cantidad de personas. Ser parte del olvido después de unos cuantos años, meses, días...
Quisiera ser como todos esos pendejos que andan por ahí buscando aceptación, quisiera no darme cuenta de que todo carece de sentido.
No me preocupa que lo sepan.
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