jueves, 30 de diciembre de 2021

Metanoia.

Desgraciadamente todo se relaciona a la estúpida pandemia.

Odio con todo mi ser lo que han sido estos últimos años y nada tienen que ver con ese virus de mierda. Por primera vez en mucho tiempo estoy escribiendo sobre mí, cuando me prometí nunca volver a hacerlo. Han sido días infinitos los que he tratado de escribir algo sin sentirme parte de la misma mierda. 

Es extraño, después de tantos años de estar aquí una gran parte de mi vida, de repente mi mente ya no me permite ser parte de lo que todos son. A pesar de ser mi naturaleza, extrañamente apareció un repelente natural.

Siento que soy una persona viviendo en un tiempo que no le corresponde, que todo ha sido una mentira, que las personas no saben en realidad quién soy. No es como que me importe, pero todos han visto algo que no es.

El pasado antes siempre estaba presente, ahora son cosas que al parecer nunca ocurrieron. Mi presente está lleno de cosas que no entiendo, cosas para las que no estoy preparado. En los últimos dos años pasaron cosas que nunca pensé que ocurrirían y hasta la fecha no logro entender cómo fue que todo pasó.

El tiempo no pasa, pero luego salgo y me doy cuenta de todo lo contrario.

¿Yo dónde he estado? No lo sé, eso quisiera saber.

He vivido cosas peores, como cuando me vi forzado a comprarle un cupcake a unos hippies con tal de que me dejaran ir y así llegar a tiempo al concierto de At The Drive-In. O cuando le di ride a una señora que discretamente me quiso incluir en su club de swingers.

Cuando me robaron seis mil pesos en el cajero o cuando una morra me utilizó para algo, ¿para qué? Hasta la fecha no lo sé, pero algo fue.

Soy más profesional pero soy peor persona, ¿para qué o qué?

No espero nada, lo único que esperaba era poder escribir unas cinco veces al mes, pero mi mente me decía que me dejara de estupideces. Hay miles de historias escritas que espero algún día tenga la voluntad de compartir. Nada personal, sólo cosas que no quisiera eliminar de mis recuerdos.

Las personas no son lo que parecen, yo tampoco. Así como te quise mucho también te puedo odiar mucho.

Nadie piensa en el próximo año porque a nadie le importa. Todos se van y nadie regresa.

Descubrí que he superado muchos traumas que en realidad no eran traumas, sólo eran cosas que no entendía. Hoy tampoco las entiendo, pero ahora no me importa.

No olviden que la mejor jubilación es un arma de fuego. Yo me quería jubilar más joven pero algo pasó.

Les confieso que cuando tuve el coby-bryan deseaba morir pero no tuve tanta suerte. También les confieso que cuando estoy completamente ebrio me tomo las pastillas que sé no debería tomar, pero al parecer sólo estoy tirando mi dinero. Qué farsa.

Es curioso cómo podrán seguir pasando los años y la basura nunca saldrá de la cabeza.

¿Qué les puedo decir? Han pasado cosas que jamás imaginé que pasarían. Se fueron personas que pensé que siempre estarían, personas que pensaba me entendían. La verdad es que nunca nadie me entendió. Las pocas personas que aún quedan no tardan en irse y está bien, todos deben seguir su camino.

Hace unos días leí lo que ocurría hace unos años y las cosas sí son muy diferentes, pero sólo desde adentro, por fuera todo es muy difícil, yo sólo hago lo posible por sobrevivir sintiendo algo diferente desde adentro, porque la verdad es que afuera todo se ve igual.

La verdad es que a veces no entiendo ni para qué me tomé la molestia de hacer cosas.

También entiendo que ese es mi problema, en mi mente todo está estancado, mientras el tiempo pasa en la vida de todos los demás, no voy al ritmo de nadie y los demás no están para esperarme, no sería justo.

Pasaron demasiadad cosas, más de las que me hubiera gustado, antes no ocurria nada y así todo estaba muy bien. Ahora sólo son cosas que no quisiera que ocurrieran otra vez.

Como escribir en esto, siento que lo hago más por cumplir con una parte de mi ser, que por ser algo que en realidad siento. Al final aquí son puras pendejadas que ni el señor internet puede entener. Ni yo me entiendo.

Cosas que uno nomás escribe pa'que la gente pendeja se imagine cosas.

Me la pelas, adiós.




Pero una cosa es cierta: Te odio.